Con motivo del Día Mundial del Cáncer de Pulmón, la SEOR destaca la aportación de la oncología radioterápica en el tratamiento y supervivencia de la enfermedad

La radioterapia es un tratamiento fundamental en el cáncer de pulmón

• El tratamiento de radioterapia combinada con quimioterapia e inmunoterapia ha permitido un incremento en la supervivencia global de estos pacientes sin precedentes
• La SEOR destaca el descenso de la mortalidad, gracias a las mejoras de las técnicas quirúrgicas y radioterápicas y a la combinación de diferentes terapias sistémicas
• Además, la SEOR advierte de la mala evolución del Covid-19 en pacientes no vacunados en tratamiento activo por cáncer de pulmón y recomienda su acceso prioritario a la vacunación

Madrid, 15 de noviembre de 2021-. La Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) se une a la conmemoración del Día Mundial del Cáncer de Pulmón, que tiene lugar el 17 de noviembre, y advierte del mayor riesgo de mala evolución de la infección por COVID-19 en pacientes no vacunados diagnosticados de cáncer de pulmón que están recibiendo tratamiento activo. Por ello, la SEOR recomienda su acceso prioritario a la vacunación dentro de los programas que establezca el Sistema Nacional de Salud. Por otro lado, la SEOR destaca el descenso de la mortalidad por cáncer de pulmón, gracias a la mejora en las técnicas quirúrgicas y radioterápicas, que permiten el tratamiento y curación de tumores en estadios iniciales, y a la combinación de estos tratamientos locales con otros sistémicos más novedosos, como la inmunoterapia y las terapias dirigidas. La radioterapia se ha convertido, pues, en un tratamiento fundamental en el cáncer de pulmón.

El doctor Felipe Couñago, coordinador del Grupo Oncológico para el Estudio del Cáncer de Pulmón (GOECP) de SEOR y oncólogo radioterápico del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid y del Hospital La Luz (Madrid), señala que “las nuevas tecnologías permiten el tratamiento y curación de tumores en estadios iniciales, con escasa repercusión sobre el pulmón sano. De esta forma, podemos tratar con intención curativa y con altas tasas de control local a pacientes no candidatos a cirugía por mala función pulmonar o comorbilidades diversas”.

Couñago asegura que, en estadios localmente avanzados, “el tratamiento de radioterapia combinada con quimioterapia e inmunoterapia ha permitido un incremento en la supervivencia global de estos pacientes sin precedentes. También se ha incrementado de forma espectacular en pacientes diseminados oligometastásicos, gracias al tratamiento radioterápico dirigido a la metástasis”. Además, la radioterapia constituye “un tratamiento fundamental para mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes, ayudando a controlar síntomas como el dolor, el sangrado, etc.”

El futuro de la radioterapia en cáncer de pulmón pasará por la radioterapia de precisión personalizada.  El doctor Couñago explica que “esta personalización del tratamiento vendrá de la mano no sólo de los avances tecnológicos, sino también de la radiogenómica. Esto es, podremos predecir mediante el análisis del genoma de cada individuo cómo va a responder este a la radioterapia”.

Es fundamental disminuir el hábito del tabaco

En España, el cáncer de pulmón es responsable del 25% de las muertes por cáncer y se estima que en 2021 la incidencia de nuevos casos de cáncer de pulmón sea de 29.549, manteniendo la tendencia al alza. Sigue siendo el tercer tumor en incidencia en hombres después de los tumores de próstata y colorrectal y en mujeres después de mama y colorrectal, y es la primera causa de muerte por cáncer en hombres y la segunda en mujeres.

Por ello, y a pesar de las mejoras en los tratamientos, la disminución del hábito tabáquico es fundamental para disminuir la incidencia de cáncer de pulmón. Couñago afirma que “continuamos trabajando en programas de deshabituación tabáquica”.

Del mismo modo, el oncólogo radioterápico destaca la colaboración de las asociaciones de pacientes, que son cada vez más visibles y ayudan a poner de manifiesto las necesidades de las personas con cáncer de pulmón, tanto durante los tratamientos oncológicos como en la rehabilitación posterior. “Es necesario seguir trabajando juntos para mejorar la asistencia a los pacientes”, concluye Couñago.