Cuatro sociedades científicas promueven la creación de equipos cardio-onco-hematológicos pioneros en España para «mejorar la salud cardiovascular de los pacientes con cáncer»
Madrid, 6 de marzo de 2017.- Las sociedades científicas de Oncología Radioterápica (SEOR), Oncología Médica (SEOM), Cardiología (SEC) y Hematología y Hemoterapia (SEHH), se han unido por primera vez para impulsar la creación de equipos formados por especialistas de las cuatro disciplinas médicas con el objetivo de “mejorar la salud cardiovascular de los pacientes oncológicos”. Según refleja el documento, que han firmado los representantes de estos cuatro colectivos, uno de los principales puntos de partida es que las enfermedades cardiovasculares constituyen, junto con las segundas neoplasias, las principales causas de muerte en supervivientes de cáncer.
El documento, titulado «Cardio-Onco-Hematología en la práctica clínica», tiene como objetivo la actualización de los conocimientos aplicables a la práctica clínica diaria de la cardio-onco-hematología y la promoción del desarrollo de equipos locales multidisciplinares que mejoren la salud cardiovascular de los pacientes con cáncer.
El proyecto que han liderado SEOR, SEOM, SEC y SEHH no sólo plantea una meta clara, sino que además pone sobre la mesa cómo conseguirlo. Los expertos que han participado en la elaboración de este primer documento de consenso precisan que los equipos de cardio-onco-hematología “han de reunir a los profesionales implicados en la atención de pacientes con cáncer, con el objetivo de facilitar su tratamiento oncológico adecuado y minimizar la toxicidad cardiovascular”.
Tomando como punto de partida el abordaje y la prevención de las complicaciones cardiovasculares, consideradas la principal causa de mortalidad en pacientes supervivientes de cáncer, las sociedades científicas señalan que estos equipos son “herramientas de control de calidad en el cuidado de la salud y deben coordinar la investigación y la educación médica continuadas en su campo”.
Bajo su punto de vista, el desarrollo de protocolos locales de prevención, diagnóstico y tratamiento precoz de la cardiotoxicidad, “reduce las suspensiones precoces del tratamiento antitumoral, optimiza los resultados en salud y reduce costes”.
Una de las evidencias que recoge el documento es precisamente que los avances en la detección precoz y el tratamiento del cáncer “han reducido de forma significativa la mortalidad de los pacientes”. Sin embargo, “mejorar el pronóstico no es sólo curar el tumor, sino prevenir, diagnosticar y tratar eficazmente las complicaciones derivadas de las terapias onco-hematológicas”. Los especialistas firmantes reconocen la necesidad de aumentar el conocimiento y la investigación en este campo, ya que los tratamientos onco-hematológicos triplican el riesgo de eventos cardiovasculares a medio y largo plazo.
Dentro de las complicaciones cardiovasculares derivadas de los tratamientos onco-hematológicos, la disfunción ventricular secundaria a cardiotóxicos es una de la que genera más controversia en su definición y manejo y, si no se realiza un despistaje activo, puede pasar desapercibida durante años y se termina diagnosticando en una fase irreversible de la enfermedad.
También se ocupa el documento de los mecanismos de prevención, entre otras cosas porque los expertos concluyen que “cáncer y corazón comparten múltiples factores de riesgo”. Entre las estrategias a seguir para la prevención, apunta la reducción del efecto cardiotóxico directo, la promoción de un estilo de vida cardiosaludable y el uso de cardioprotectores en prevención primaria, entre otras.
Estos equipos pioneros, según matiza expresamente el texto, se ocuparán del manejo clínico de las complicaciones cardiovasculares de los tratamientos antitumorales. Cita así a los casos de insuficiencia cardiaca, hipertensión arterial, arritmias, cardiopatía isquémica, miocarditis y periocarditis, valvulopatías, enfermedad venosa tromboembólica, hipertensión pulmonar y enfermedad vascular periférica.
Desde la SEC, la Dra. Teresa López ha señalado que “el interés que tiene este documento es que es el primer documento de consenso sobre cardio-onco-hematología que firman de forma conjunta todas las sociedades científicas implicadas en el manejo de pacientes con cáncer, a diferencia de otros documentos avalados sólo por alguna sociedad”. A su juicio, “en el manejo de las complicaciones cardiovasculares de los pacientes oncológicos faltan evidencias científicas”, al tiempo que ha manifestado que, “probablemente va a ser difícil tenerlas dentro de grandes ensayos clínicos, y por ello es importante promover la creación de grupos multidisciplinares, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de estos pacientes”. Ha abundado en el objetivo del documento, del que ha dicho que ha de “ser un documento práctico, que ayude a los cardiólogos, oncólogos y hematólogos para que tengan un punto de partida razonable en el manejo de estos pacientes”.
“Afortunadamente, la supervivencia del paciente con cáncer ha mejorado mucho en los últimos años. Sin embargo, la prevalencia de enfermedad cardiovascular en ellos es muy elevada, y no podemos dejar que el beneficio que hemos ganado en supervivencia del cáncer se pierda en mortalidad cardiovascular”, matiza la Dra. López.
Por su parte, el presidente de SEOR, el Dr. Pedro Lara, ha valorado el documento como un “paso adelante, dado que son sociedades científicas que tratan con las dos patologías más importantes en los países desarrollados, que son las enfermedades cardiovasculares y el cáncer”. Ha añadido que es un “avance extraordinario para los pacientes”, al tiempo que ha señalado que “nos coordinamos para aportar diferentes armas terapéuticas”.
Sobre el papel de la Oncología Radioterápica, el presidente de SEOR ha hecho especial hincapié en la “elevada precisión del tratamiento, que lo convierte en un elemento más cardiosaludable”.
Para los doctores Ana Santaballa y Juan Antonio Virizuela, miembros de la Junta Directiva de SEOM, “el documento incide en la importancia del riesgo de eventos cardiovasculares a medio y largo plazo en pacientes con cáncer que han recibido tratamiento, así como en la necesidad de una colaboración multidisciplinar a través de la creación de equipos de cardio-onco-hematología en los centros españoles. En la SEOM somos conscientes de que estos equipos son la clave para una adecuada prevención y tratamiento de los eventos cardiovasculares de nuestros pacientes”.
Desde la SEHH, la firma de este consenso “supone un gran avance en el cuidado de los pacientes con cáncer”. El valor de la guía práctica elaborada es “la optimización del diagnóstico y tratamiento de las complicaciones cardiovasculares y trombóticas en estos pacientes, acercándonos a un cuidado integral real”, afirman los Dres. Pascual Marco y Ramón García Sanz, vicepresidentes de la SEHH. Este documento “permitirá desarrollar objetivos comunes que mejoren la atención de unas complicaciones que hoy en día representan una de las principales causas de mortalidad de los pacientes con enfermedades neoplásicas”, concluyen.