Con motivo del Día Mundial de los Cuidados Paliativos, la SEOR destaca la eficaz aportación de la oncología radioterápica

La radioterapia, una aliada imprescindible para el paciente con síntomas

• La eficacia de la radioterapia es alta, especialmente en el control del dolor, a menudo intenso y factor limitante de la calidad de vida
• La radioterapia es un tratamiento imprescindible y muy eficiente gracias a sus características y a los avances tecnológicos experimentados en los últimos años

Madrid, 7 de octubre de 2021-. Con motivo del Día Mundial de los Cuidados Paliativos, que se celebra el próximo 9 de octubre, la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) quiere destacar la aportación tecnológica y terapéutica de la Oncología Radioterápica, uno de los tratamientos más eficaces y, por tanto, necesarios en el proceso de atención al paciente con sintomatología derivada de un tumor o de sus metástasis y que precisa de cuidados paliativos en el desarrollo de su enfermedad oncológica. Los avances tecnológicos que la radioterapia ha experimentado en los últimos años la convierten en una herramienta imprescindible y muy eficiente en el control de síntomas en el paciente que se encuentra recibiendo cuidados paliativos.

El cáncer y las consecuencias derivadas de la progresión de esta enfermedad constituyen un problema clínico de primer nivel en la sociedad actual, debido tanto al creciente número de casos como a la cada vez mayor prevalencia de pacientes con enfermedad avanzada o metastásica, que precisan de cuidados paliativos para el control de los síntomas producidos por el tumor.  Se calcula que en torno a un 30-35 % de los pacientes que llegan derivados para valoración a un servicio de oncología radioterápica son tratados con intención paliativa.

El doctor Luis Olay, Jefe de Sección de Oncología Radioterápica del Hospital Central de Asturias en Oviedo, Máster en Cuidados Paliativos por la Universidad Autónoma de Madrid y miembro de la SEOR, señala que “la radioterapia constituye, sin duda, una modalidad de tratamiento oncológico muy eficaz para el tratamiento paliativo del cáncer”. Olay explica que las indicaciones son variadas y muy numerosas, y “en un alto porcentaje de pacientes, se obtiene un alivio relativamente rápido de los síntomas y cuadros clínicos”.

Entre estas indicaciones cabe destacar el dolor, casi siempre intenso e incapacitante, derivado de las metástasis óseas o bien de tumores localmente avanzados, que en su crecimiento afectan a estructuras tales como hueso, plexos nerviosos, partes blandas, etc. Otra de las indicaciones es la compresión medular oncológica, que se produce cuando la afectación de la médula espinal por un tumor o una metástasis vertebral puede conducir a una parálisis permanente.

La radioterapia también es un tratamiento fundamental para los sangrados producidos por tumores locamente avanzados o sus metástasis en cualquier localización (hemoptisis, hematemesis, metrorragias, rectorragias, etc.) y en la clínica neurológica derivada de la afectación del sistema nervioso central por tumores o metástasis (cefalea, convulsiones, parálisis…). De igual forma, es una terapia de aplicación en la compresión u obstrucción de órganos vitales como el esófago, el bronquio, los grandes vasos o los uréteres por tumores localmente avanzados o metastásicos.

Aliada imprescindible gracias a sus características y avances tecnológicos

Los avances tecnológicos han mejorado los resultados de la radioterapia “clásica” al permitir abordar, mediante un proceso previo de planificación de tratamiento, lesiones y tumores antes considerados inaccesibles. Entre estos avances debemos mencionar, entre otros, la Radioterapia de Intensidad Modulada (IMRT), la Radioterapia Guiada por Imagen (IGRT), la radiocirugía (utilizada en Sistema Nervioso Central) o la radioterapia estereotáxica fraccionada (SBRT), la cual permite la administración de dosis altas en pocas sesiones sobre volúmenes muy delimitados, sea un tumor o una metástasis.

De acuerdo con el doctor Olay, “todo ello convierte a la radioterapia en una aliada imprescindible en el cuidado del paciente con síntomas”. Además, algunas características de la radioterapia paliativa la hacen aún más atractiva en estas situaciones. La planificación del tratamiento se lleva a cabo mediante la realización de un escáner, sin someter al paciente a procedimientos largos o costosos. En la gran mayoría de casos, se utilizan muy pocas sesiones, con la comodidad consiguiente para los pacientes. Además, la eficacia de los tratamientos es alta, especialmente en el control del dolor, a menudo intenso y factor limitante de la calidad de vida, o en el control de los sangrados de cualquier origen, que siempre suponen un deterioro físico y emocional muy importante.

En la situación actual de pandemia, estas características han permitido que los tratamientos paliativos con radioterapia hayan seguido administrándose a los pacientes en cuidados paliativos, con muy pocas demoras y manteniendo una alta accesibilidad a los Servicios de Oncología Radioterápica.

A todo ello hay que sumar los avances que día a día se producen en otros campos de la investigación, como la inmunoterapia, cuya combinación con la radioterapia mejora aún más los resultados obtenidos.